jueves, 29 de julio de 2010

Happy together

Ayer tuvo lugar en la finca canalillera, la nuestra, el estreno local y mundial de mi documental Quiero vivir entre hierbas. Me sentí altamente agasajada al ver que la terraza estaba llena de curiosos cinéfilos amantes de los pastores. Agradecidos y encantados, los invitados devoraron todo tipo de aperitivos ricos en colesterol y cerveza, mucha cerveza. Lo que más me gustó fue que les gustó. Y eso es lo que más feliz te puede hacer. Vale que hay estupendos zapatos de 125 euros que te proporcionan mini orgasmos puntuales, pero un aplauso nacido de la emoción es lo más. Ni citas ni teléfonos, conexión con la gente.
Así que me sentí plenamente inflada como un globo. Y con esto y una bonita entrega para mañana os dejo por el momento. Ah, os recomiendo la exposición de Pippilote Rist en la Miró. Salí flotando. La larará la la.

miércoles, 28 de julio de 2010

La vida del monologuista

Es la mía. Una unidad monoparental tiene que hacer malabarismos para llenar huecos y espacios deshabitados. He decidido, que a parte de hacer el perro y transitar por mi cama y programar el despertador y el ventilador, me voy a empachar de películas. Empecé con 8 y medio y Cinturón Rojo y me encantaron. David Mamet es El hombre. De mayor quiero ser como él pero sin tanta pistola.
Pero la diversión máxima de ayer fue la cena-reencuentro con los Grandes Historiadores del Arte. Jamón serrano a tope, croquetas y cañas. ¿Se puede ser más feliz? Gritos, auto-compasión, brindis por el doctor en mecánica de no sé qué y por la vida en general.
Estas cenas son altamente terapéuticas y hoy he venido al trabajo cantando y ahora todavía bailo con los pies. Tengo que decir que también compramos lotería para el Gran Sorteo del 17 de agosto creo. Si me toca, seguire deleitándoos con mis aventuras desde las Islas Caimán. Ya os informaré. Supongo que también estoy excitada porque hoy estreno el documental de pastores con mis pequeños amigos. Oh yes! Así que celebremos el día mundial del buen humor y del jamón.

lunes, 26 de julio de 2010

Hacer lo que te da la gana

Este fue sin duda el primer fin de semana en que dejé el calendario y la minutera del reloj aparcada y me dediqué a hacer todo lo que quería o me negaba a hacer. Transité por mi casa ahuyentando todo tipo de fauna (mariposas, hormigas y alguna araña), me metí en un tren, me bajé, me bañé, fui a un cine el domingo a las 2.10 de la tarda esquivando cualquier tipo de compromiso familiar inquietante, vi un documental de delfines y tuve insomnio. Ah, y para rematar, sesión de cine de verano a la luz de la luna. Si es que en el fondo estamos hechos de micro partículas de felicidad tejidas a partir de estos pequeños episodios. Y cuando conseguimos hilarlas con dos puntadas seguidas, nos encanta, y nos da la sensación de que estamos en el buen camino.
Y con esto y un café, ya estoy de nuevo en mi puesto de mando y control. Feliz lunes a todos los que consiguieron arrastrarse hasta sus mesas.

viernes, 23 de julio de 2010

Viernes is here

Como aquí nadie comenta ni dice este tanga es mío, os pongo un video a ver si os espabiláis un poco.

Pasad 48 horas de lujuria, placer y helados. Yo intentaré ahuyentar a la araña que había hoy en la cortina de mi ducha e invocaré al Dios de las vacaciones.

jueves, 22 de julio de 2010

Cosas que sí pasan

En mi excursión gallega viví un episodio bastante cómico. Vi a un hombretón de unos 50 años, lo que normalmente se conoce por el prototipo de hombre español y al mismo tiempo escuchaba un hilillo de música de Sergio Dalma que decía eso de bailar pegados es bailar bla bla. Pensé que aquella letanía procedía de una tienda, cuando en realidad nacía del ipod de ese señor. Toma ya. Un tío, que por su aspecto natural podría estar cazando moscas con la mano o cortando árboles la punta de cualquiera de sus miembros, estaba escuchando una balada gaylor total para mi gusto. Para mi ese rollito baladero es mezclar azucar con miel, sacarina y luego para culminar un buen chorrito de nata. Después del empacho, todos a vomitar.
No soy quién para indicar a los señores lo que deben escuchar, pero esto demuestra que los tíos también lloran y que esa pose de Rambo que muchos se gastan es simplemente un disfraz de neopreno en este mar de perdición vital en que estamos naufragando.
Y con esto, sigo con mis labores variopintas, que no son pocas. Sobre todo, nada de baladas y seremos grandes amigos.

miércoles, 21 de julio de 2010

Vueltas sobre un eje uniforme

Amigos,
No estaba en una clínica de desintoxicación por ingesta de botulinas, todavía no. Estaba en una misión secreta y comercial: asistir a la inauguración de una tienda de muebles panaeuropea y globalizada que promete felicidad y momentos caseros a sus clientes. Hasta ahí puedo leer. Es realmente alienante este tipo de aventuras. Por una parte pude ver el Cantábrico y su inmensa fuerza atávica, que me hizo sentir capitana y pirata de mi vida (pasar tantas horas sola no sé yo si es bueno), pero por otra parte vi como los consumidores teledirigidos dormían en la calle para ganar un cheque de 200 euros para comprarse enseres hogareños made in Alguna República donde tres se enriquecen y 6700 trabajan.
Estoy muy encendida últimamente. Ladro y saco fuego. Me das una cerilla y pareceré una torre petrolera. ¿Falta de sueño, calor, spleen? Apuesten y vencerán.
Por otra parte, me acaban de interrumpir, creo que necesito vacaciones. Sin más.
Así que sin quejarme, y al son de guitarras portuguesas me despido. Que alguien hable o si no morirá una vestal virgen y copy.

miércoles, 14 de julio de 2010

Parece que no aprendo

Canción de la mañana.
Creo que el ratón se ha ido para siempre, mejor me ahorro los detalles. Y la verdad es que casi me pongo a llorar al ver que me lo había cargado. En fin, una mujer samurai como yo, acostumbrada a manejar catanas, me he visto derrumbada en 0,2 fracciones de tiempo. Y eso que quejarse es de niños pequeños. Debe ser que lo soy por mucho que las canas intenten falsificar mi rebeldía.
Y es que hace calor, tengo la sensación de que no voy a ninguna parte, las calles de Barcelona están para lanzar gas sarín y cargarse a toda esa gente ruidosa y zombie, yo entre ellas, que recorre las aceras como hormigas despistadas.
Y el nacionalismo, las reivindicaciones, las etiquetas, las amenazas, me aburren profundamente. Estoy en pleno SPM, alejaros de mí.
Y encima me duele el pecho. Hoy es uno de esos días en que te gustaría vivir en una cabañita del bosque y desaparecer del alcance de cualquier GPS.
Pero estamos vivos, sanos y con nómina, así que a llorar a otra parte.

martes, 13 de julio de 2010

Día dos ratuno (0 48 horas humanas de ansiedad)

Ayer aislé esta idea en la cabeza: un budista no hubiese montado este escándalo por un pequeño ser de 5 cm. Lo hubiera acogido como un regalo de la creación. Yo lo amo, es más, le dije que se fuera, que sería más feliz en la calle, yendode rebajas. Pero el tío, después de desaparecer durante el día, aparece a la 1, cual Cenicienta resacosa y cruza mi habitación muerto de risa. ¡Qué tío! Me tuve que ir de casa. Moraleja: la casa me está echando. Lo mejor del caso es que el jueves tengo una invitada: tengo dos días para despedirlo o mi reputación quedará a la altura del betún. Otro tema es, si vas a un hotel, no habrá ratolins.
A parte del monotema roedores, esta noticia me ha emocionado: Hallan los cadáveres de dos ancianos abrazados. Y a continuación: Los Bomberos encontraron ayer en Vigo los cadáveres de una pareja de ancianos en su piso de la calle Vilagarcía. Estaban abrazados, y las primeras hipótesis apuntan a que el marido habría fallecido hace 15 días, mientras que la mujer llevaba unos cinco días muerta. Se cree que, a raíz del deceso del anciano, ella se habría tendido a su lado hasta fallecer de inanición. No tenían hijos y rondaban los 80 años de edad (via El País)
Amaros y multiplicaros, y evitad el camino de ratones amarillos.

lunes, 12 de julio de 2010

Ya no vivo sola

Este finde por fin he salido al mundo exterior y me han pasado bastantes cosas, pero lo de ayer a las 3 de la mañana creo que supera lo anterior. Empecé a escuchar ruidos y pensé que sería la gata Paquita, que quizás se me había colado en casa. Total, que después de encender y apagar la luz 32 veces, veo un pequeño trasero de ratón colarse entre unas bolsas. El efecto taquicardia fue inmediato. Y encima escuchaba gemidos eróticos de fondo. Me sentí MUY Bridget Jones la verdad. No me podía dormir. Y al mismo tiempo pensé pobrecito, debe estar super asustado el pequeño ratón (toda esta mierda la empezó Disney y sus rollitos de animalitos monos que te cuentas fábulas paternalistas y te conviertes en mejor persona). Moraleja: he dormido 4 horas, y creo que voy a tener que aniquilar a mi pequeño príncipe ratón. En fin, si fuera silencioso lo dejaba vivir pero es que el muy canalla hace unos ruiditos que en 30 metros su reino y movimientos son los míos inexorablemente.
Bueno, mañana os contaré cómo me convertí en oxígeno el sábado por la noche. Feliz lunes (todavía me va el corazón a mil, creo que estoy lejos de ser una budista autocontrolada...)

viernes, 9 de julio de 2010

Premio al camarero del mes

En una ciudad de modernas y muchachitas en mini falda en sus felices 30 que pasean perritos, se agradece una terraza con camarero simpático.
Sucedió, no es ficción, en la calle Enric Granados para ser exactos. Dos cañas a las 9 de la noche con brisita y espectáculo de calle gratis.
Unos muchachotes de al lado pidieron unas tapas y el camarero les prometió que aparecería con un collar de croquetas. Qué gran imagen.
Luego pasaron las del perro, que pienso, nenas, aparca el perro y vete com un maromo para celebrar el verano, y nuestro amigo pizpireta les soltó: ¿si me compro una correa me lleváis con vosotras?. Con gran naturalidad y soltura iba repartiendo bromas entre los clientes hasta que me dijo el precio de las cañas y le contesté si creía que estábamos en Manhattan o qué. Conseguí una rebaja de 20 céntimos que luego se convirtieron en su propina y pensé, aquí volveré. Necesitos birras y risas.
Y con esto y un lote extra de sueño acumulado, me despido de ustedes. Hoy tengo el pase con los jefes del documental. Glups, Santa Rita, asísteme.

jueves, 8 de julio de 2010

Yes I can

Parecemos marionetas con escasa capacidad de maniobra. A veces. Otras somos super heroínas. Tenemos el caso de nuestra amiga T.F.M. que con su par de ovarios por corbata se metió el otro día en una inmobiliaria y se presentó. Después de estrechar la mano al empleado de turno, lo dijo claramente: quiero comprarme un piso. Dos habitaciones, con luz, pero no luz, sino mucha luz: rayos. Y no me busques nada en edificios de mil plantas, quiero tener pocos vecinos. Es lo que me gusta.
Total, que una cosa que tenía anidando en la uña del pie se materializó finalmente en una acción. Me alegro querida.
Yo sigo combinando planos de pastores, ovejas y filosofía de vida. Estoy aprendiendo, estoy contenta. Es de lo más gratificante que podía pasarme últimamente. Y regar las plantas, cierto es. Se está convirtiendo en una de mis actividades preferidas últimamente. Seguimos para bingo. Tengo que vender familias equilibradas que compran muebles multicolores. Uff. Supongo que un reparador de ventiladores también tiene trabajo entre pecho y espalda.

miércoles, 7 de julio de 2010

Hojas que se las lleva le viento

La vida es tan sencilla como deseemos que sea. Hasta que aparece algo por sorpresa y te borra del mapa de un plumazo. Somos hojas barridas por el viento en silencio. Ese ego peleón que tanta guerra te da es nada, es como un viejo cassette de éxitos del verano que ya no interesa a casi nadie.
Un gato y una tortuga pueden ser una gran compañía. Mañana más.

martes, 6 de julio de 2010

Dicen que la culpa es nuestra

Tal cual. Ayer, mientras calentaba silla con la editora y cortábamos y pegábamos por aquí y por allí salió la conversación. ¿Por qué las mujeres estamos en una posición de segunda regional? ¿Por qué mucho tío incompetente pero con el lema Yo la tengo más grande tatuado en la frente tiene cargos de poder y responsabilidad? Yo sé que la opción inteligente es dejar pasar a la borregada y nosotras haremos nuestra misión a la sombra de un buen árbol. Pero las cosas están mal repartidas. Y lo de que se asocie todavía embarazo a grano social en el culo me parece escandaloso.
La puntilla al asunto vino cuando la super editora me lo soltó a bocajarro: La culpa es nuestra, porque elegimos o a niñatos o a impresentables niños malotes que no saben hacer ni la o con el canuto. Esos son los que han de acompañarnos por la vida. ¿Te imaginas al último lerdo que conociste haciendo un gazpacho? Yo no.
¿A caso este juego infinito del pilla pilla está diseñado para que no nos aburramos en esta vida? Porque si por programación lo de las parejas fuera más "fácil" seguramente cada uno de nosotros tendría 83 maridos y mujeres, básicamente por aburrimiento. Ahí queda eso, que cada uno se lo piense mientras se ducha por 3 vez. Tengo una araña que recorre mi pantalla a alta velocidad. ¿Tiene quizás un mensaje para mí? mmm

lunes, 5 de julio de 2010

Todavía queda amor

En todos los sentidos, ampliamente repartido, no exclusivamente entre los que dicen sí quiero. El calendario nos llevó de nuevo a una entrañable ceremonia de sellado y envase del amor. Eso sí, amigos, las próximas bodas en diciembre y con bufanda, por favor, porque casi salgo en camilla. En esos momentos de delirio, sudor y abanicos, me dediqué a observar CÓMO es una boda y sus invitados: plateados, dorados y los excesos que conlleva, así como la de juanetes ahogados por unos tacones imposibles.
Me fascina. Yo creo, que ya por saturación, si algún día llego a celebrar que el amor visitó mi vida, lo haré todo al revés. Podrás venir en bolas, envuelto en una sábana, descalzo o con traje de hada. Y procuraré que te sientas libre y con ganas de hacer lo que te dé la gana. Lo de sentarse tres mil horas en una mesa es mortal. Pero a parte de eso todo, muy bien. Risas, comida que no te harías en casa, camareros guapos (histórico) y un chorreo continuo de bromas, nuestra especialidad.
Y luego, a 43 grados, el cuerpo pedía claramente un baño. Y aquí entra en juego mi escasa memoria: después de la ingesta de comida para un mes, me meto en la piscina romana con mis colegas y al cabo de una hora aprox. tuve una especie de corte de digestión de esos que dices, si no muero hoy es porque no me tocaba. Así que celebremos que el amigo B. me salvó con una manzanilla y que estoy aquí contándoos cómo es el amor en el siglo XXI. Ala, quereros y multiplicaros, que me entretiene mucho!

viernes, 2 de julio de 2010

Un día de alcance personal

A ritmo de este temazo me dispongo a narrar un día más en este pequeño planeta de ponys multicolores. El tema es que además de ir a currar, comerme un bocadillo de fuet, ver dos escaparates altamente aspiracionales y no recibir ninguna llamada erótico-festiva, no me ha pasado nada espectacular. Pero lo mejor del caso es que me parece bien. Necesitamos grandes actos inaugurales y fundacionales para que nuestra vida tenga sentido. Un antes y después. Cuando vivía en el barrio X era antes de mi periodo de equilibrio en la calle Y. Y suma y sigue. Pues no amigos, la vida tiende más a ser una llanura de pastos, con alguna piedra y arco iris puntual, flotando allá por el horizonte.
¿Síntomas de madurez, es el calor que me deshace la materia gris o simplemente se trata de una nueva finta y paso final de aceptación? Hagan una redacción de máximo 200 palabras sobre el tema, y cuidadito con la ortografía.
Y como mini historia final: retirada de uno de los grandes de la publicidad, el señor B. ¿Motivo? Quiere vivir la vida. Un día descubrió una flor, la olió, se emocionó. Al día siguiente vio la flor y no pudo pararse. Al otro día también. Vio que se le pasaba la vida entre hamburguesas y nóminas de vértigo.
Y mientras tanto, en un lugar perdido de la ciudad, pink pony deshace las horas con el reloz y se imagina nadando como llego al mundo en una playa muy azul.